Lenzing crece un 25,6% en el primer trimestre pese a la subida del precio de la energía

Lenzing arranca el primer trimestre a la alza. La compañía austríaca de hilatura, que nombró el pasado abril a Stephan Sielaff como consejero delegado, ha cerrado el primer trimestre del ejercicio, finalizado el pasado 1 de marzo, con un crecimiento interanual del 25,6%, hasta 615 millones de euros. Frente al primer trimestre de 2020, justo antes del estallido de la pandemia, las ventas de la empresa han aumentado en un 32%.

Entre diciembre y febrero, la empresa ha situado su beneficio neto en 34,1 millones de euros, un 14% más que en el primer trimestre de 2021. En el periodo, su margen de ebitda fue del 14,3%, cinco puntos enteros menos que el ejercicio anterior.

“En el primer trimestre, la empresa se ha visto significativamente afectada por los desarrollos extremos en el mercado de la energía y productos básicos, al igual que el resto de la industria manufacturera, aun así, esperamos seguir acelerando nuestros ingresos compensando el efecto del incremento de costes”, explica la empresa en un comunicado.

Lenzing ha situado sus ventas un 32% por encima que en el mismo periodo de 2020

“La demanda de nuestras fibras biodegradables a base de celulosa también han registrado una tendencia positiva en el primer trimestre”, señala Stephan Sielaff, consejero delegado de Lenzing Group. A día de hoy, el grupo opera con las fibras Tencel, Lenzing, Ecovero y Vocel.

“Somos conscientes de que la industria del textil y los tejidos no puede seguir operando como lo hace en la actualidad; queremos ir un paso más allá y continuar nuestro cambio de un modelo lineal hacia uno circular”, explica el directivo.

El pasado 1 de abril, Stephan Sielaff fue nombrado consejero delegado de la compañía, tomando el relevo a Cord Prinzhorn, que ocupaba el cargo de consejero delegado interino desde el cuarto trimestre del año pasado. Además, Thomas Obendrauf, director financiero de la empresa, también dejará su puesto una vez finalice su contrato en junio de 2022.

Fundado en 1892 en Austria, el grupo de hilatura cuenta con fábricas ubicadas en República Checa, China, Reino Unido, Indonesia y Estados Unidos. La empresa, especializada en la producción de fibras celulósicas, abrió hace dos meses en Tailandia la mayor planta de lyocell del mundo.