16 oct 2011
Es difícil decir cuánto hay de razonable y cuánto de supersticioso en el comportamiento que tienen los mercados financieros y en el juicio que hacen sobre la fiabilidad del crédito español, pero lo cierto es que a menudo es imposible encontrar una relación entre la información económica que emite el país y la marcha de su prima de riesgo.
En todo caso, sí que hay un amplio consenso en una idea general: España ha vivido por encima de sus posibilidades y, después de los años de la fiesta inmobiliaria, la crisis vuelve a situar al país entre las economías de cola de Europa Occidental.
Pero no todo es negativo en la percepción internacional de España, que mantiene algo de su sex appeal entre los empresarios. Para muestra, un botón: una nueva edición de la encuesta de la consultora inmobiliaria Cushman & Wakefield sitúa a dos ciudades españolas en el top ten de las mejores ciudades donde hacer negocios.
La encuesta, que evalúa la percepción de los empresarios hacia el atractivos de las 36 primeras ciudades europeas para hacer negocios a partir de doce factores de análisis, sitúa a Barcelona en sexta posición (pierde una respecto a la encuesta del año anterior) y a Madrid en la séptima (escala una), por encima de urbes como Bruselas, Múnich, Zúrich, Ginebra o Milán.
Sólo cinco ciudades superan a las dos urbes españolas: Londres, París, Frankfurt, Ámsterdam y Berlín. Las capitales financieras de británicos, franceses y alemanes mantienen sus posiciones de oro, plata y bronce, y las capitales holandesa y alemana adelantan a Barcelona y Bruselas, que cae de la cuarta a la octava posición.
Seguramente algo tendrán que ver unos costes laborales todavía inferiores y una fiscalidad más amable hacia las empresas de la economía española para que Barcelona y Madrid se cuelen entre las grandes ciudades europeas. Y, cómo no, seguro que la promesa de un clima cálido y una calidad de vida superior a la nórdica otorgan muchos puntos.
Pero no sólo eso: Barcelona, Madrid y España plantan sus banderas en el mundo a través de sus empresas, que exhiben la capacidad de innovación empresarial y el talento de los profesionales que las dirigen y de aquellos que las levantan desde la base. Las joyas de la corona de la economía española, como Telefónica, Repsol o Banco Santander, brillan en Europa y demuestran que España no sólo tiene tocho, sol y playa. Y, entre éstas, las grandes empresas de moda.
Christian De Angelis
Christian De Angelis es periodista, especializado en macroeconomía. Amante del Excel y de cualquier programa informático de estadística, sigue día a día la evolución de la economía mundial. Crear empresas es otra de sus pasiones, pero esa es otra cuestión.
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