Richemont estanca sus ventas en el primer trimestre por la debilidad de China
El grupo suizo, matriz de Montblanc, ha reducido un 19% sus ventas en la región de Asia-Pacífico entre abril y junio y ha cerrado los tres primeros meses de su ejercicio con una caída global de la cifra de negocios del 1%.
16 jul 2024 - 12:14
La debilidad de China pasa factura a Richemont en el primer trimestre. El conglomerado suizo del lujo, matriz de la marca Montblanc, ha cerrado el periodo con una caída del 1% de las ventas, hasta 5.268 millones de euros. La debilidad de la demanda en China arrastró las ventas en Asia-Pacífico, que se desplomaron un 19%, hasta 1.809 millones.
En particular, las ventas en el mercado de China, Hong Kong y Macao descendieron un 27%, una caída que se compensó en parte por las subidas en otros mercados de la región como Corea del Sur y Malasia.
En cambio, el grupo logró elevar su facturación en el resto de mercados: en Europa, el alza fue del 4%, hasta 1.171 millones de euros; en Américas, del 11%, hasta 1.215 millones; en Japón, del 42%, hasta 603 millones, y en Oriente Medio y África del 9%, hasta 470 millones.
Por canales, las ventas del grupo se mantuvieron estables en retail, con una cifra de negocio prácticamente idéntica a la del año anterior, de 3.631 millones de euros. En wholesale y royalties, los ingresos cayeron en cambio un 6%, hasta 1.322 millones de euros, mientras que en el canal online subieron un 6%, hasta 315 millones.
En China, Hong Kong y Macao, la caída de las ventas de Richemont llegó al 27%
Asimismo, Richemont se resintió por la caída de ventas de la división de relojería, con una contracción del 14%, hasta 911 millones de euros, pero logró subidas en los otros dos grupos de actividad: en joyería, las ventas se elevaron un 2%, hasta 3.656 millones de euros, y en la categoría otros (donde se incluyen sus marcas de moda y accesorios) la subida fue del 6%, hasta 701 millones de euros.
La compañía ha destacado a través de un comunicado que las ventas a tipo de cambio constante aumentaron un 1% en el periodo, comprendido entre el 1 de abril y el pasado 30 de junio, “a pesar de las persistentes incertidumbres macroecocnómicas y geopolíticas”.
China castiga al lujo
La pobre evolución de las ventas de Richemont se produce en un contexto de contracción en el mercado global del lujo, castigado particularmente por la debilidad de la demanda en China. Ayer mismo, la británica Burberry anunció una caída del 22% en sus ventas en el canal retail en el primer trimestre, un periodo que calificó de “decepcionante” y que costó el cargo al hasta ahora consejero delegado, Jonathan Akeroyd.
Burberry ha encogido sus ventas en todas las regiones salvo Japón: en Asia Pacífico la empresa ha decrecido un 23%, registrando en China un descenso del 21%; en América la empresa ha retrocedido un 23%, y en la región de Emea la caída de las ventas ha sido del 16%.
Burberry, Swatch o L'Oréal son otras compañías del sector que se han visto afectadas por la débil demanda en China
China también ha castigado la evolución de la compañía relojera suiza Swatch, que redujo un 14,3% sus ingresos en el primer semestre a causa de “fuerte caída de la demanda de artículos de lujo en China”.
Fuera del lujo, China también ha castigado a otros segmentos, como el de la cosmética. El grupo francés L’Oréal prevé un menor crecimiento del mercado de belleza a lo largo del año por la debilidad de las ventas en China.
Según un estudio de Bain&Company, el comercio de bienes personales de lujo alcanzará a facturar entre 365.000 millones y 385.000 millones de euros en 2024, lo que dejaría una evolución plana o hasta un tímido crecimiento del 4%. El sector se verá especialmente lastrado por los consumidores de mercados claves como China y Estados Unidos, donde se han registrado grandes caídas en la confianza del consumidor.