Hilaturas Ferre: nuevos nichos y más capacidad para superar la pandemia en 2022
La compañía alicantina especializada en la producción de hilos de algodón reciclado ha finalizado 2021 con una facturación por debajo de 18 millones de euros, cifra con la que cerró 2019. Para este año, la empresa tiene previsto “superar por fin la pandemia”.
4 abr 2022 - 04:57
Hilaturas Ferre se encomienda a 2022. La compañía de hilatura, especializada en la producción de hilos a partir de poliéster y algodón reciclado, ha puesto en marcha un plan de crecimiento que pasa por entrar en nuevos nichos y ampliar su capacidad productiva para superar los niveles previos a la pandemia en 2022.
La compañía finalizó el ejercicio 2021 ligeramente por debajo de 2019, rozando los 18 millones de euros que facturó ese año. Para 2022, los planes de Hilaturas Ferre pasan por “superar por fin la pandemia”, según explica Luis Pita, consejero delegado de la empresa, a Modaes.es.
El directivo reconoce que el momento actual que atraviesa el sector es “apasionante”, pero también “volátil”. Ahogada por las subidas de los costes de las materias primas, los precios disparados de la electricidad y los ecos de la rotura de la cadena de suministro, la industria textil se enfrenta “a unas reglas del juego que no se habían visto antes”, explica Pita.
“En un año, el precio de nuestras principales fibras (el algodón reciclado y el poliéster) se ha disparado un 70%”, asegura el consejero delegado de Hilaturas Ferre. Además, según Pita, el precio del algodón reciclado ha subido entre un 30% y un 40% desde inicios de año.
“Cuando parecía que el coronavirus estaba dando una tregua, el conflicto en Ucrania ha vuelto a disparar el precio del poliéster, y el coste de los fletes, que parecía que se estaban relajando, también ha repuntado”, se lamenta el ejecutivo.
Hilaturas Ferre renovará su maquinaria para aumentar su capacidad productiva entre un 10% y un 12%
Con todo, la situación está favoreciendo a los productores en cercanía frente a los de Asia, según observa Pita. “Las marcas están volviendo, el problema es que no hay tejido industrial para acoger todo el volumen, pero nos da una ventaja”, explica.
Ante esta situación de incertidumbre, Hilaturas Ferre ha reaccionado con una nueva estrategia, buscando adivinar los siguientes pasos del mercado y apostando por nuevos nichos, como nuevos materiales.
La empresa está potenciando su línea Nature, que combina fibras de cáñamo, lino y bambú, y tiene la intención de incluir más fibras posconsumo en su oferta, un desarrollo en el que está invirtiendo cantidades “importantes”, describe Pita.
El mix de la oferta de Hilaturas Ferre también ha variado en el último año. “Vimos un giro importante de consumo hacia el textil hogar con el confinamiento, pero ahora habrá un consumo más básico”, explica Luis Pita. En 2019, esta área del negocio copaba un 30% de las ventas de Hilaturas Ferre, cifra que se disparó a casi un 60% en 2020.
“Es probable que el textil hogar se resienta”, opina Pita. En la cartera de Hilaturas Ferre, el cambio ya se comienza a reflejar. La moda “está volviendo a coger protagonismo”, explica Pita, señalando que el 55% de las ventas de la empresa corresponden a hilos para producri ropa.
La empresa genera entre un 30% y un 35% de sus ingresos en la Península Ibérica
Para acelerar su crecimiento, Hilaturas Ferre también ha continuado con el plan que puso en marcha el año pasado con el objetivo de ampliar su capacidad productiva. La compañía ya ha culminado la primera fase de la estrategia, que era la renovación de la maquinaria de hilatura. El proceso finalizó hace tres semanas y ha aumentado la capacidad productiva de la empresa aumente entre un 10% y un 12%.
El plan cuenta con otras dos fases, que contemplan tanto una mejora de la maquinaria como de las instalaciones de Hilaturas Ferre. Entre los planes de la empresa está construir naves “más óptimas para la producción”, poniendo en el centro la digitalización.
Otro pilar de crecimiento para la empresa es la sostenibilidad. Actualmente, Hilaturas Ferre cuenta con una planta fotovoltaica y acaba de iniciar un proyecto para implantar esta tecnología en dos naves más. La compañía también se ha aliado con Aware, empresa especializada en blockchain, para mejorar la trazabilidad del producto.
Heredera de la empresa Hijos de Antonia Ferre, fundada en 1914, Hilaturas Ferre se puso en marcha en 1947 con la producción de hilo reciclado. Si, en sus inicios, la empresa ocultaba que se trataba de un producto reciclado, porque se asociaba a una menor calidad, con el boom de la sostenibilidad en la industria de la moda pasó a convertirse en una ventaja competitiva.
La empresa, con sede en Banyeres de Mariola (Alicante), genera entre un 30% y un 35% de sus ingresos en la Península Ibérica y el resto de Europa supone un 25%. En Norteamérica, la compañía genera otro 25% y el resto corresponde a Asia, especialmente China y Bangladesh.
Para el futuro, Hilaturas Ferre está en proceso de “recuperar la identidad como Ferre” tras la escisión de Recover, que la empresa vendió al fondo estadounidense Story3 en 2020. El spin off de la española se especializa en algodón reciclado y ha trabajado para marcas como Wangler, H&M, Tommy Hilfiger y The North Face.