Esprit: en la cuerda floja la licencia a Deichmann que salvaría a la marca

Las licencias de Esprit, en juego. El director ejecutivo de Esprit, William Pak, habría firmado un contrato para beneficiarse de la licitación de la marca, antes incluso de que la compañía se declarara insolvente. La información, avanzada por TextilWirtschaft, podría dificultar la vuelta de la marca Esprit al mercado.

Tras un turbulento proceso de licitación, en octubre, Deichmann adquirió los derechos de la marca Esprit para comercializar todas las categorías de producto de la marca. El grupo alemán de calzado, sin embargo, cedió sus derechos de las líneas de ropa a Theia Brand. La sociedad, registrada en Londres, ha cambiado su nombre recientemente a Pink Shop Capital Limited.

Este traspaso, sin embargo, podría tener detrás al director ejecutivo de Esprit. Según la investigación del medio alemán, Pink Shop Capital está registrada en la misma dirección postal en Delaware donde Esprit también tiene registrada su filial estadounidense.

Theia Brand ha cambiado su nombre a Pink Shop Capital Limited

Esta acción debería ser legal, si no fuera por la acusación de que los activos de empresas alemanas habían sido transferidos a otras compañías bajo la gestión de Pak, incluso antes de que Esprit solicitara la insolvencia del negocio en sus mercados europeos a mediados de 2024.

Meses antes incluso de que Esprit vendiera la licencia de su marca a Deichmann, la empresa transfirió estos mismos derechos a una compañía fuera de Europa. Se desconoce si la compañía que recibió entonces los derechos forma parte del grupo Esprit o está relacionada con el principal accionista de la compañía, Northpoint Talent. En octubre, Deichmann adquirió los derechos de marca de Esprit. El acuerdo se firmó después de que los comités de acreedores de las sociedades insolventes de Esprit dieran su aprobación.

Con este acuerdo, Deichmann, que ya ofrecía zapatos de la marca Esprit desde 2019 y paga derechos de licencia anuales, pasó a adquirir los derechos de la marca de calzado, además de los derechos europeos de la marca de moda, los patrones y las direcciones de Internet.

El caso de Esprit está siendo investigado por el bufete alemán Flöther & Wissing

Esprit, que lleva años atravesando una situación compleja, afectada por una pérdida de posicionamiento en el mercado que llevó a una brusca caída de las ventas y a acumular pérdidas, se declaró insolvente en su mercado local, Alemania, el pasado mayo. En julio, la compañía fue declarada en quiebra en Francia.

A cierre del ejercicio 2023, la empresa alemana congregaba 145 empleados en Francia y contaba con cien puntos de venta en el país. Posteriormente, vendió los derechos de su negocio en Europa al fondo de inversión británico Alteri. Sin embargo, según Esprit, esto tuvo lugar en el marco de un “acuerdo básico aún no vinculante”.

En agosto, la empresa anunció el cierre de todas sus tiendas y un cambio en su modelo de negocio para licenciar su marca en diferentes categorías y a finales del mes pasado, comunicó que ponía a subasta todos sus activos a través de Internet. En conjunto, se pusieron a la venta alrededor de 2.000 artículos.