Max Mara traslada su sede en España y se instala en un palacete de Barcelona

Del polígono al palacete. Max Mara traslada su sede en España y abandona sus actuales instalaciones en una nave del polígono industrial La Pedrosa en L’Hospitalet de Llobregat para ubicarse en un palacete de estilo novecentista en el barrio de Sant Gervasi, de Barcelona.

La compañía italiana instala sus oficinas en una torre construida en 1914 del arquitecto Enric Sagnier Villavecchia. Max Mara ocupara mil metros cuadrados de este inmueble, en el que también ubicará su showroom.

El grupo, pilotado en España por Giorgio Turini, opera en el país con toda su cartera de marcas, que se compone de casi una decena de enseñas, de las cuales cinco cuentan con una red de retail. La más extendida es Max Mara, con doce tiendas.

Ahora, la filial española está volcada en el desarrollo de sus otras marcas, como Max&Co y Weekend. De la primera, la empresa suma dos flagships stores en Madrid y Barcelona y cinco franquicias, mientras que Weekend se ha centrado en el desarrollo del travel retail.

El grupo Max Mara asumió directamente la gestión del mercado español en 2009, cuando creó la filial en Barcelona desde donde gestiona la expansión de la marca en la Península Ibérica. Si bien la compañía no revela datos segmentados por países, España se ha convertido ya en el séptimo mercado internacional de la compañía, y la filial, que emplea a 220 personas, está en números negros desde el ejercicio 2015.